Somos un proyecto con cuatro patas. En el intento de levantarnos al principio, estuvimos a pata coja en ocasiones, hasta aprender a andar con dos piernas. Nos caímos, sí, pero con la clara intención de levantarnos y ponernos de pie. De las dos a las tres piernas, y tras varia meteduras de pata vamos estabilizandonos, en el camino, despacio pero seguro. Con la cuarta pierna hemos conseguido la estabilidad, la base. Y seguimos adelante.
Las raíces tienen que tener su lugar, libre y fuerte. Lo tenemos claro, no se puede florecer sin una base fuerte. No puede dar. Si la base es saludable y buena podrá florecer. ¡Y con varios colores!
Crecemos con flexibilidad, en un movimiento constante. Adaptándonos al solo, bailando con el viento. Unir. Creando nuevas formas e imágenes. Adaptándonos. Aprendiendo. Y compartiendo, dando. Estamos disfrutando del camino, mirandoel objetivo, en busca de nuevos caminos, siempre creciendo.